Una de las cosas que más me gusta del uso de la película es el ritmo al que te obliga, el como enlentece todo el proceso de la creación de una fotografía sobre todo si estás utilizando una cámara de gran formato. Es algo que necesariamente exige un estudio mucho más detallado de la imagen que estás en ese momento creando. Las luces hay que afinarlas al máximo pues la latitud (rango dinámico) de la película es muy limitado, y desde el punto de vista compositivo el margen de maniobra es mínimo sino has compuesto bien. Por esta zona he pasado bastantes veces en el pasado, pero nunca me había fijado en otras composiciones en las inmediaciones precisamente por no estar obligado a moverme debido a las limitaciones del equipo y la tecnología usada. Composiciones que van a esperar hasta el próximo otoño. En esta ocasión tuve la suerte de disfrutar durante unos pocos minutos de una iluminación solar del primer plano mientras el fondo quedaba en la sombra, un contraste realmente guapo y que además ayudó mucho en la exposición para dar algo de volumen al cielo.
Os aconsejo pinchar sobre la foto para verla a mayor resolución en otra pestaña y después F11 si queréis verla a pantalla completa.
Wista 45 VX, Nikkor SW 90 mm f4.5, Degradado neutro (0.9D). Placa de 4″x5″ de Ilford Delta-100 revelada con Ilfotec DD-X y escaneada con Epson V-700. Procesado global en LightRoom
