Esta visión que a mi imaginación le evoca la entrada de alguna criatura gigante en la playa es muy dependiente de dos condicionantes. El primero es el nivel de arena existente, con un poquito menos que el actualmente existente es incluso mejor, pues se vislumbran con más claridad las patas delanteras y traseras de ella. El otro condicionante es la iluminación solar directa para resaltarla, sobre todo la forma de la «cabeza» pues la sombra del cuello ayuda a destacarla, así como esas aparentes enormes escamas puntiagudas en su cuerpo. Visiones que mi creatividad intenta plasmar con las condiciones ideales.
Os aconsejo pinchar sobre la foto para verla a mayor resolución en otra pestaña y después F11 si queréis verla a pantalla completa.