Con esto de que cada vez llueve menos voy perdiendo práctica con el manejo a dos manos del paraguas y el disparador. Ahora es como que tengo que pensar los pasos, cuando antes era casi instintivo :). Hoy la mar estaba preciosa, en esos días en el que el horizonte deja de ser una línea recta para convertirse en pequeñas sinusoides, aunque en esta fotografía no se aprecie por el tiempo de exposición.
Os aconsejo pinchar sobre la foto para verla a mayor resolución en otra pestaña y después F11 si queréis verla a pantalla completa.