Tengo la esperanza de algún día poder coger las luces que quiero en esta preciosa composición. Realmente después de más de 10 intentos a lo largo de los años me he dado cuenta que para tener esta visión se dispone de una ventana temporal de 30 a 45 minutos, no más. Y que además varía mucho con el estado de la mar. Cuando esta tarde me acercaba al lugar lo hacía con las pulsaciones al máximo, pues estaba viendo como los últimos rayos solares teñían de un naranja intenso las agujas de esta playa. Pero caminar por aquí exige máxima concentración, no es aconsejable tener una caída en estos acantilados. Cuando ya había llegado las nubes del oeste se encargaron de tapar parcialmente el sol, y las agujas perdieron mucho protagonismo.
Os aconsejo pinchar sobre la foto para verla a mayor resolución en otra pestaña y después F11 si queréis verla a pantalla completa.
Canon 5DIII, Canon 16-35 mm f4L, ISO 50, CPL. Fusión manual de la luminancia de dos imágenes y procesado en Lightroom
