Toda la costa de las dos islas en las que estuve está repleta de formaciones rocosas de granito de una belleza plástica increíble, parece como si fuesen plegadas y se quedasen con esas ondulaciones características. Para poder sacarles el máximo potencial hay que tener marea baja para adentrarse en los acantilados y buscar rincones por doquier. En ese sentido estuve muy limitado pues las luces guapas siempre coincidieron con marea media-alta y el margen de maniobra era muy pequeño. No obstante algunos rincones si que surgieron a mi vista a base de mucho investigar.
Os aconsejo pinchar sobre la foto para verla a mayor resolución en otra pestaña y después F11 si queréis verla a pantalla completa.
Canon 5DIII, Canon 16-35 mm f4L, ISO 50, CPL. Procesado global en LightRoom
Juan Carlos
15 Sep 2019Muy atractiva esta mezcla de geometrias y colores … excelente en su simplicidad.
Un abrazo
José Fernández
15 Sep 2019Rincones como estos con marea baja te encuentras a miles. Como me coincidió con el medio día la luz cenital solar las arruinaba. En ésta tuve la suerte de ver este rincón, y otros más de ese día, cuando empezaba a llover. Pero aqui en los atardeceres con marea baja te aburres haciendo fotos, te lo aseguro. Un abrazo